
Tais & Pablo
Hoy nos gustaría hablaros de la boda de una las parejas que confiaron en nosotros para organizar su boda: Tais y Pablo.
Sabemos que todos los novios son únicos, por eso su boda debe ser tan singular como ellos. Para nosotros es importante conocer su historia (¡lo que nos dejen al menos!) para poder contarla a través de su gran día. Conocerles nos ayuda a entablar una relación amena y sincera que será la base sobre la que construiremos este intrépido y divertido proyecto. Por ello, nos gustaría compartir la historia de amor de Tais y Pablo, una historia de la que tuvimos el placer de formar parte gracias a que nos eligieron para organizar su boda.
Tais y Pablo se conocieron a través de unos amigos (que hoy son los padrinos de su hija Lola) un día que ninguno de los dos quería salir. Unas semanas después se volvieron a encontrar en el mismo sitio, ¿Casualidad? Y ahí empezó todo… Ambos son personas muy familiares, les encanta la playa, la montaña, el misterio, Formentera, la música y jugar en la cama con sus dos hijas. Nunca creyeron en las casualidades sino en la CAUSALIDAD, con mayúsculas.
Como wedding planners, somos muy camaleónicos y nos pirran las BODAS DIFERENTES en las que nos dejen volvernos un poco locos. Por eso cada boda supone un nuevo reto, una manera de reinventarnos a través de ellos. En el caso de Tais y Pablo teníamos que conjugar todos esos elementos para hacer algo que de verdad hablara de ellos: algo auténtico, familiar y divertido en el que sus hijas estuvieran muy presentes.
Ellos querían una fiesta de mil colores, amena e informal acorde con su manera de ser y gustos, en la que no faltara ningún detalle importante para ellos. Teniendo en cuenta todo esto, era fundamental encontrar un sitio con encanto donde disfrutar de una buena pero no típica gastronomía, querían algo diferente. Para ellos era importante tener una ceremonia personalizada, emotiva y divertida con participación de sus hijas. Todos nuestros clientes nos contratan porque quieren una boda de calidad, especial y personal en la que todo esté cuidadosamente pensado y organizado.
El resultado fue una boda llena de color y alegría, informal y de estilo mediterráneo, celebrada en una finca rústica con música en vivo durante el aperitivo y maravillosos rincones gastronómicos para el almuerzo.
Para la decoración, queríamos algo alegre, fresco y muy colorido, por lo que propusimos una paleta de colores atrevida a base de rosa, rojo, fucsia, naranja, turquesa y verde esmeralda. En la ceremonia colgamos cintas de colores en el árbol que enmarcaba el altar y utilizamos muebles antiguos de la propia finca, combinados con flores de temporada y cojines de colorines. En el aperitivo, creamos un chillout a base de palés color madera, alfombras de esparto, flores, velas y cojines de colores. En el almuerzo montamos mesas imperiales de madera vista con centros de mesa llenos de luz y color compuestos por guirnaldas de tinajas de barro y macetitas de loza con preciosas flores. Para completar el montaje, sillas crossback, servilletas rojas de llengos mallorquinas y vasos de cuatro colores, todo ello bajo un cielo multicolor de banderines. ¡Una apuesta arriesgada y que quedó de infarto!
Sin lugar a duda, una boda en la que cada detalle hablaba del ADN de los novios y en la que triunfó la verdad, el amor y la ilusión.
Os dejamos las fotos de Martín Ramis para que también vosotros podáis disfrutar de este día mágico lleno de luz y de color.





































































Pablo
Muchísimas gracias a Pasión Eventos y a todos los colaboradores por plasmar en la realidad el día fantástico que solo existía en nuestra mente.
Nos hicisteis sentir en casa, gracias
Taís y Pablo